El Valle de las Uvas es sin duda un lugar especial de Alicante, “El valle de las uvas doradas”, así se describe el Valle de las Uvas o Valle del Vinalopó. Un lugar privilegiado por su clima, muy cercano al litoral de la Costa Blanca y con todo el encanto de las zonas de interior. Lugar donde para desarrollar todo tipo de turismo, de descanso, cultural, de sol y playa, etc. Pero sobre todo es una zona muy conocida porque en ella se desarrolla uno de los trabajos más antiguos y artesanales, el cultivo y recolección de la uva de mesa. Se trata de la única zona en el mundo donde se desarrolla la técnica del embolsado. Técnica que permite una mejor conservación del fruto antes de su recolección, evita el uso de productos artificiales y produce un fruto de color, sabor y textura inigualable.
Donde está el valle de las uvas
El Valle de las Uvas está formado por siete municipios de la provincia de Alicante, de los cuales seis (Aspe, Hondón de los Frailes, Hondón de las Nieves, Monforte del Cid, Novelda y La Romana) pertenecen a la comarca del Medio Vinalopó, y por último lugar Agost que pertenece a la comarca del Alacantí. Se trata de una zona geográfica muy accidentada, en la que resaltan sus numerosos valles, donde predominan en primavera y verano los colores verdes de los pámpanos, que a partir del mes de julio se mezclan con los tonos dorados de las uvas y el blanco de las bolsas que las conservan. Además destacan las sierras que delimitan sus fronteras naturales. Sierras como El Cid, la Sierra de las Aguilas, La Mola o La Serreta.
El Valle de las Uvas está bañado por el río que le da nombre a la comarca, el río Vinalopó. Este río lo atraviesa de Norte a Sureste, entrando por Novelda, canalizado y casi seco, recoge las pocas aguas que le aporta la rambla o río Tarafa desde Aspe y desemboca en el pantano de Elche, ya en la comarca del Bajo Vinalopó. La economía de esta comarca depende sobre todo de los sectores industrial y agrícola. Hay dos líneas de negocio predominantes en estos siete municipios: el mármol y el cultivo de la vid.
Los suelos de la comarca son muy ricos en cuanto a extracción de materiales, por lo que no es difícil encontrar en sus paisajes una cantera de explotación, bien de mármol, o bien de piedra. Pero lo que más llama la atención de sus paisajes, es la segunda actividad económica de la zona, el cultivo de la vid. Dentro de este cultivo, podemos diferenciar dos grandes tipos de uva, las que se dedican para la producción de vinos, como Moscatel, Fondillón (Monóvar, Pinoso, etc,); y las que se dedican a la uva de mesa, de consumo directo (Novelda, Aspe, Monforte del Cid, Hondón de los Frailes, Hondón de las Nieves, Agost y La Romana), es esta última variedad la que predomina en el Valle de las Uvas. La gran calidad de la uva recogida en la comarca, y sus exquisitas técnicas de cultivo y protección de este fruto, ha promovido que se le otorgue la Denominación de Origen Uva de mesa embolsada del Vinalopó. Una uva de mesa blanca, con un color dorado uniforme y una piel más fina, de una calidad superior.
Cicloturismo por el valle del Vinalopó
Pero para conocer a fondo este valle y disfrutar con los cinco sentidos de todas características, lo mejor es realizar un placentero tour por los siete municipios que lo forman. El Valle de las Uvas tiene un gran atractivo turístico, además de por su privilegiada localización y su clima, por el legado cultural e histórico que se puede encontrar en sus museos y edificios.
Mi consejo es recorrer sus ciudades, pueblos y tierras en uno, o varios, recorridos ciclistas por Elda Petrer son mis preferidos. La zona es muy fácil de llevar y hay conexión mediante los trenes de MD y cercanias de Renfe.